Todo comienza por un suspiro, una sonrisa, un mensaje, un secreto, un beso. Pero termina siempre tan distinto al comienzo, desencadenando a sus espaldas una guerra.
No sólo guerras contra sus recuerdos y sus memorables momentos, también con los sentimientos, los queremos opacar y opacar hasta que hayan casi desaparecido; pero luego nos damos cuenta de que sólo nos comportamos ridículamente y perdimos nuestra oportunidad. Pero, por mi parte, no tengo problema, pues mi situación es muy distinta. Me pregunto qué sientes, y porqué yo no siento nada. Siempre supe que al terminar las personas sentían una clase de "vacío" en su corazón, pero no he experimentado nada parecido. He hablado con personas al respecto y sus opiniones son "Tú nunca lo quisiste", "Nunca sentiste nada por él", "Él no era para ti", pero luego las comparo con mis opiniones y parecen ser todo lo contrario. Había escrito sobre él, el amor y el infinito tiempo que nos prometimos estar juntos, pero el tiempo no se movió a nuestro favor y por eso ésto terminó. Se suponía que hablaría de cosas "místicas" y "mágicas" pero lo único mágico es cómo entró en nuestra mente la idea de creer en cosas por el estilo. Mágicas las historias de amor, mágicos los finales felices. Por eso ésto se trata de llevarlo a la realidad, porque no todo es mágico.
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