martes, enero 24

Las marcas nos hacen reconocibles. Son las que nos diferencian a unos de otros. Lo que nos hace distintos.
Puedo ser tan bueno como malo el tener marcas, porque pueden ser cualquier clase de cosas, desde un temor hasta una biografía que marcó tu vida. Todo vale.
Miedos. Al hablar de miedo, me da miedo. Sé que si confío en mí misma no tengo porque tenerlo, pero, nunca está de más plantearse la peor situación. Para que cuando venga, sepamos qué hacer. Es una forma de auto-protegerse. Es sólo una forma de no entrar en pánico.
Muchas personas me han dicho repetidas veces que tengo que empezar a confiar en mí misma. Porque sin confianza no hay certeza de lograr cualquier meta, y si no confío en lo que sueño, ¿de qué sirve hacerlo?
El futuro, creo que es una de las cosas que me aterra y al mismo tiempo es una de las cosas por las que más siento curiosidad.
Hay veces que, de sólo pensarlo, puedo llorar por horas y horas. Hay veces que sonrío y me repito a mí misma que no tengo que preocuparme
Otro de mis granes miedos es decepcionar a la gente que me rodea. No me gusta fallar. No es por no asumir mis errores, sino que no quiero que pase lo malo para corregirlo. Ojalá fuese fácil no equivocarse.
La presión está sobre ti. Exigirse es ley. Superarse es la prueba, y hay que pasarla.
No sé qué hago hablando de mis mayores miedos, si al momento de ponerme a prueba todos son del mismo tamaño, y te opacan de la misma manera.
No sé qué pensar. No sé qué hacer. La de desesperación nunca había llegado a tales niveles.

jueves, enero 19

Here we go again.

Bueno, no he escrito nada sobre cómo fue el  2011, o sobre cómo anhelo que sea el 2012.
Pero con decir que el 2011 fue uno de mis peores  años es suficiente.Ni siquiera quiero recordar como fue, ya que fue miserable en muchos aspectos.
En el 2011 perdí muchísimas amistades. Muchas de las amistades que perdí eran buena amistades, o eso creía. Me quedó bastante claro que no lo eran.
El 2011 no fue más que poner en práctica la frase "Lo que no me mata, me hace más fuerte". Friedrich Wilhelm Nietzsche. No fue nada más que una manera de hacerme más fuerte y atravesar  las adversidades como si nada estuviese pasando. Fue sólo tiempo de superación, pero qué mejor recompensa que madurar.
Dejé de preguntarme tantas cosas, y en lugar de eso, empecé a darle respuestas a cada una de mis preguntas anteriores: Finalmente, acepté que para poder dejar mis confusiones, no necesito más preguntas, sino más respuestas.
Del 2012 no puedo decir mucho, sólo sé que será un buen año. O, por lo menos, eso es lo que espero de él.

I know something good can work for me.